martes, 12 de octubre de 2010

Müller milicic neva, (2003) Enseñando a leer.
ANÁLISIS FÓNICO
  1. ¨Para aprender a leer el niño debe asociar el sonido de la letra con su dibujo.
  2. El niño debe aprender a distinguir los sonidos de las letras en las palabras, especialmente el sonido especial.
  3. El primer paso es mostrar al niño la letra que se le quiere enseñar y decirle como suena. No es aconsejable decir el nombre de la letra.
  4. Otro ejercicio es hacer repasar al niño la letra con el dedo índice, diciendo el sonido paralelamente.
  5. La búsqueda de palabras que rimen también ayudara a adquirir los sonidos de las letras.
  6. La ejercitación de reconocimiento de las vocales  es una de las tareas fundamentales para enseñar a leer.
  7. La combinación de una consonante primero y una vocal después se llama silaba directa (pa-lo-fo) y habitualmente se enseña inmediatamente después de las vocales.
Lo primero que debemos asegurar es que el  niño identifique las vocales, con la finalidad de que las pueda conjugar posteriormente con las consonantes  y formas silabas para posteriormente formar palabras, es importante que las primeras silabas y palabras no sean difíciles para el niño, ya que de lo contrario le causa fatiga y desesperación. Lo aconsejable es que las primeras silabas estén compuestas de una consonante y una vocal y las palabras tengan alrededor de dos silabas, la dificultad podrá irse aumentando cunado estemos seguros de que el niño domine la primer etapa.                                                                                                     
Quintero Torres Gregorio, método onomatopéyico. México D.F. Patria.

El método onomatopéyico lleva, pues, la actividad, la acción en sí mismo. Es dinámico por naturaleza y no necesita más.
Por eso dentro de su propia metodología, en el periodo inicial de la enseñanza, se pueden aumentar los motivos de acción en lo que toca asegurar el concepto de forma de las letras ya sea para conocerlas o para escribirlas  más  fácilmente.
He aquí los diferentes medios que, unidos o aislados, pueden emplearse, después de haber realizado los ejercicios musculares acompañados de rimas y de los que se trata ampliamente en la guía de esta método.”

Dentro de mi poca experiencia en el proceso de enseñanza –aprendizaje de la lectoescritura, veo conveniente la posibilidad de aplicar el método onomatopéyico el la enseñanza de las vocales, ya que esto facilitara la comprensión en el niño por los sonidos y las relaciones con imágenes.
 Se debe tomar en cuenta que es el primer acercamiento a un proceso que para el niño tendrá en cierta forma dificultades.
El método se puede continuar a lo largo de la lectura, pero lo recomendable seria también unirlo al método silábico esto es pues también criterio personal, no intento que la lecto - escritura se tenga que dirigir por estas dos vertientes, es respetable cada opinión.
A continuación se explica los pasos del método onomatopéyico enfocado a las vocales.
“La primera letra se llama el llanto de la ratita y la segunda el pito del tren.
La enseñanza contando cuentos alusivos a los grabados. El maestro imitara patéticamente el llanto de la ratita i i i, u u u  individualmente y a coro. Y luego las buscara como elementos de palabras: higo, hilo, uvas uñas, hule. El maestro escribirá en el pizarrón cada letra, explicando los elementos. Lo niños las escribirán en sus pizarras y cuadernos. Algunos en el pizarrón. Cada letra, por tanto, debe ser sucesivamente leída, pronunciada, identificada como elemento de la palabra, vista, leída y escrita por los niños. Se entiende  que la i y la u se enseñan una después de la otra sucesivamente con sus seis pasos respectivos.”

“La primera letra es el grito del cochero y la segunda el grito del muchacho espantado. Se enseña una después de la otra. Naturalmente, contando cuentos alusivos a las  escenas que representan los grabados. El maestro procurara dramatizar los gritos para impresionar a los alumnos. Luego ara que los niños repitan los sonidos  y después que los encuentre como elementos de palabra: oso, ocho, olla, hacha, etc. Escritura por el maestro en el pizarrón y escrita  por los alumnos. No se olvide que cada letra debe ser sucesivamente oída. Pronunciada, identificada como elemento de palabras, vista, leída y escrita. El maestro dará animación a la clase asiéndola muy movida por su parte y por la de los alumnos.”

“Esta letra se llama la pregunta del sordo.
Para enseñarla se sigue exactamente los seis pasos indicados  para las demás letras a fin de que sea sucesivamente oída, pronunciada, identificada como elemento de palabra, vista, escrita en tarjetas.
El juntar las tarjetas y los niños juntar los sonidos. Tratándose de las vocales, pobra el maestro decir instantáneamente el grito de la letra o designarla por los nombres convencionales del grito del muchacho espantado, etc., etc. Con las consonantes no pobra hacer lo mismo como se dirá después.”
Negrete Paz María de Lourdes, la lectoescritura y su contextualización, Morelia, Michoacán, México 2006.

“Aun cuando existe una guía de método onomatopéyico, se facilita aquí una ligera explicación de los pasos que deberán seguirse para la enseñanza de cada letra. Son seis los puntos, (URIBE: 1966, 31-34):
1.    cuento onomatopéyico relatado por el maestro, y pronunciado también por el (y en ocasiones por los alumnos), de la onomatopeya o letra onomatopéyica descubierta, fonetismo que imita los ruidos y voces de la naturaleza, porque, según la feliz expresión de cejador y Frauca “La naturaleza habla”. Este es el fonetismo onomatopéyico que por ser natura, es agradable y sugestivo lo cual no sucede con la enseñanza de las letras derivadas fríamente con el análisis de las palabras normales.
2.    Repetición fonética de la onomatopeya por los niños individualmente y luego en coro.
3.    Identificación del sentido o letra onomatopéyica, como elemento de palabra, por los niños con auxilio del maestro. Esta investigación es de análisis fonético. Si se trata, por ejemplo de la i buscar palabras en que esta letra sea inicial como estas: Inés, iglesia, igual, Irene con el objeto e hacer notar con mayor claridad su sonido. De este modo se evita el análisis de la palabra completa y se logra, el mismo fin: hacer ver a los niños que las palabras están compuestas por elementos que se pueden aislar.
4.    Escritura en el pizarrón, por el maestro del sonido onomatopéyico (letra), identificando ya, en el elemento verbal, y lectura simultanea del nuevo signo.
5.    Lectura de la nueva letra por los niños.
6.    Escritura de la misma por los niños.
1     Como este ejercicio es difícil y puede cansar a los niños, es conveniente trabajar 2 o 3 palabras por clase  y después cambiar de ejercicio, para evitar que se aburra.
Si un niño parece cansado es mejor cambiar de ejercicio.
2     Es útil que cada niño vaya formulándose un juego de tarjetas con las palabras aprendidas, para jugar a formar frases.
En cada sesión, jugar con las tarjetas le ayudara al aprendizaje de palabras.
3     En su cuaderno el niño puede aprender las palabras aprendidas y al frente hacer un dibujo que le represente.
Por ejemplo; sí el niño ha escrito la palabra pelota, debe dibujar una pelota frente a ella.
4     Cuando el niño ha escrito una frase en su cuaderno, puede dibujar y leerla varias veces para automatizar la lectura.
Leer una frase varias veces le ayudara a automatizar la lectura.
5     Después de cada sesión, cada niño deberá tener una hoja  con palabras y frases dibujadas por él para ir formando su propio libro.
Las hojas escritas y dibujadas por él mismo servirán para formar su propio libro.
6     Las frases con las que el niño trabaja n deben ser más de 4 o 5 palabras, para facilitarle el aprendizaje.

1     Como este ejercicio es difícil y puede cansar a los niños, es conveniente trabajar 2 o 3 palabras por clase  y después cambiar de ejercicio, para evitar que se aburra.
Si un niño parece cansado es mejor cambiar de ejercicio.
2     Es útil que cada niño vaya formulándose un juego de tarjetas con las palabras aprendidas, para jugar a formar frases.
En cada sesión, jugar con las tarjetas le ayudara al aprendizaje de palabras.
3     En su cuaderno el niño puede aprender las palabras aprendidas y al frente hacer un dibujo que le represente.
Por ejemplo; sí el niño ha escrito la palabra pelota, debe dibujar una pelota frente a ella.
4     Cuando el niño ha escrito una frase en su cuaderno, puede dibujar y leerla varias veces para automatizar la lectura.
Leer una frase varias veces le ayudara a automatizar la lectura.
5     Después de cada sesión, cada niño deberá tener una hoja  con palabras y frases dibujadas por él para ir formando su propio libro.
Las hojas escritas y dibujadas por él mismo servirán para formar su propio libro.
6     Las frases con las que el niño trabaja n deben ser más de 4 o 5 palabras, para facilitarle el aprendizaje.
7 Como este ejercicio es dificil y puede cansar a los niños, es conveniente trabajar dos o tres palabras por clase y despues cambiar de ejercicios, para evitar que se aburra.si un niño parece cansado es mejor cambiar de ejercicio.
8 es util que cada niño vaya formulandoce un juego de tarjetas con las palabras aprendidads, para jugar a formar frases.en cada secion, jugar con las targetas le ayudara al aprendizaje de palabras.
9 en su cuaderno el niño puede anotar las palabras aprendidas y al frente hacer un dibujo que le reprecente.
10 cuando el niño ha escrito una frace en su cuaderno, puede dibujar y leerla varias veces para autmatizar la lectura. leer una frace verias veces le ayudara a automatizar la lectura.
11 despues de cada secion, cada niño debera tener una hoja con palabras y fraces dibujadas por el para ir formando su propio libro.
l12las frases con las que el niño trabaje  no deben ser mas de cuatro o cinco palabras para facilitarle el aprendizaje.